Baku, la capital de Azerbaiyán, ofrece una mezcla fascinante de tradición e innovación. Una visita imprescindible es recorrer la Ciudad Vieja (Icherisheher), un sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Aquí se pueden descubrir callejuelas estrechas, baños turcos antiguos y el majestuoso Palacio de los Shirvanshah. Justo en esta zona también se encuentra la Torre de la Doncella, una estructura histórica que ofrece vistas panorámicas de la ciudad.

En el paseo marítimo, conocido como el Bulevar de Baku, es ideal para dar un paseo relajante junto al Mar Caspio. Además, el *Centro Cultural Heydar Aliyev, diseñado por la reconocida arquitecta Zaha Hadid, es un ejemplo impresionante de arquitectura moderna y alberga exhibiciones culturales importantes.

Para quienes disfrutan del arte y la historia, el Museo de Alfombras de Azerbaiyán ofrece una visión profunda del arte de tejer alfombras, un elemento cultural clave en el país. Al caer la noche, las Torres Flameantes iluminan el horizonte de la ciudad y son un espectáculo visual que no se debe perder.

Por último, una excursión fuera de la ciudad al Gobustán** es altamente recomendable. Este parque nacional es conocido por sus antiguos grabados rupestres y por los peculiares volcanes de lodo. Baku es una ciudad de contrastes que ofrece una variedad rica de experiencias culturales e históricas.