Nefta, una ciudad fascinante en el sur de Túnez, ofrece diversas experiencias culturales y naturales. Explorar la antigua medina es una de las principales actividades, donde se pueden apreciar las estrechas calles y la arquitectura tradicional que reflejan la historia rica de la región. Este laberinto de callejuelas y casas de adobe invita a los visitantes a perderse y descubrir pequeños talleres y tiendas que venden artesanías locales.
Visitar el lago de Nefta es otra opción maravillosa. Este lago salado, rodeado de palmas datileras, ofrece un paisaje impresionante y es ideal para aquellos que buscan disfrutar de la tranquilidad y la belleza natural de la zona. A menudo, es un lugar perfecto para relajarse.
La cultura local también se puede experimentar a través de su gastronomía. Probar platos típicos como el cuscús y los dulces a base de dátiles es fundamental para entender la identidad culinaria de Nefta. Los mercados locales son excelentes lugares para descubrir ingredientes frescos y platos tradicionales, permitiendo a los visitantes conectar con los sabores de la región.
No se puede olvidar la visita a las casas tradicionales que aún conservan el estilo arquitectónico antiguo, algunas de ellas han sido restauradas y abiertas al público. Además, la religión juega un papel importante, y la Gran Mezquita de Nefta es un lugar que merece la pena visitar por su belleza arquitectónica y la tranquilidad que emana.
Por último, si se tiene tiempo, es interesante hacer una excursión a las cercanas dunas de arena del desierto, que son un punto de partida para quienes desean explorar el impresionante paisaje del Sáhara. Nefta ofrece una variedad de experiencias que reflejan la rica herencia cultural y natural de Túnez.