Ulaanbaatar, la capital de Mongolia, ofrece una variedad de experiencias culturales y naturales únicas. Explorar el Museo Nacional de Mongolia es imprescindible para aquellos que desean comprender la rica historia del país. Este museo alberga artefactos que representan la evolución de las culturas mongolas desde la prehistoria hasta la era moderna. Visitar el Monasterio de Gandan proporciona una visión del patrimonio budista del país. Es el monasterio más importante de Mongolia y un centro activo de la vida espiritual local. También es recomendable asistir a una ceremonia matutina para experimentar el canto de los monjes.
El Palacio de Invierno de Bogd Khan, que fue la residencia oficial del octavo Jebtsundamba Khutughtu, el último rey de Mongolia, es otro lugar destacado. Este sitio es tanto un museo como un monumento arquitectónico. El Parque Nacional de Terelj, situado a las afueras de la ciudad, ofrece oportunidades para disfrutar de la naturaleza y actividades al aire libre. Los paisajes montañosos y las formaciones rocosas únicas son ideales para el senderismo y la observación de la naturaleza.
En la ciudad misma, el Mercado Naran Tuul presenta una oportunidad para sumergirse en la vida cotidiana local y encontrar productos tradicionales. Disfrutar de la gastronomía mongola también es fundamental. Los platos como el buuz (empanadillas al vapor) y el khuushuur (empanadas fritas) son experiencias culinarias que reflejan la cultura del país. Finalmente, la Plaza Sukhbaatar, en el corazón de la ciudad, es un punto de encuentro cultural y político donde se llevan a cabo eventos importantes, proporcionando una vista panorámica del vibrante centro de Ulaanbaatar.