Kempinski Summerland Hotel & Resort Beirut es un destino ideal para quienes buscan una experiencia de lujo en la vibrante ciudad de Beirut. Este elegante hotel combina la sofisticación contemporánea con un ambiente relajante, perfecto para escapadas tanto de negocios como de placer. Con acceso directo a la playa, el hotel ofrece un entorno pintoresco que invita a disfrutar del sol y el mar Mediterráneo.
Las instalaciones del Kempinski Summerland incluyen múltiples restaurantes que sirven una variedad de cocinas, desde platos locales hasta opciones internacionales, garantizando experiencias gastronómicas memorables. Los huéspedes pueden relajarse en las impresionantes piscinas o rejuvenecer en el spa de lujo, que ofrece una amplia gama de tratamientos diseñados para el bienestar total.
El hotel también cuenta con salones de eventos bien equipados, lo que lo convierte en una opción ideal para conferencias y bodas. Su personal profesional y atento está siempre a disposición para asegurar que cada estancia sea memorable.
La proximidad al centro de la ciudad permite a los visitantes explorar fácilmente los principales atractivos culturales y comerciales de Beirut. Ya sea disfrutando de un cóctel en el bar del hotel al atardecer o paseando por la playa privada, Kempinski Summerland Hotel & Resort Beirut ofrece un entorno acogedor y lujoso que invita a la relajación y el disfrute.
Beirut, la capital de Líbano, es una ciudad rica en historia y cultura, ofreciendo una variedad de actividades interesantes para los visitantes. Al explorar Beirut, uno de los puntos de partida esenciales es el Corniche de Beirut, un extenso paseo marítimo que ofrece vistas panorámicas del Mediterráneo, ideal para caminar, correr o simplemente disfrutar del ambiente relajado de la costa. En el corazón de la ciudad, el Centro de Beirut es una mezcla de lo antiguo y lo nuevo, con una arquitectura que refleja su pasado histórico y una vibrante escena contemporánea con tiendas, restaurantes y cafes.
Para aquellos interesados en la historia y la arqueología, el Museo Nacional de Beirut es una visita imprescindible. Este museo alberga una vasta colección de artefactos que narran la rica historia de Líbano desde la prehistoria hasta la época medieval. La Plaza de los Mártires es otro hito significativo, siendo un símbolo de resistencia y un lugar clave durante varios momentos históricos del país.
El barrio de Gemmayzeh es famoso por sus calles llenas de encanto donde se pueden encontrar galerías de arte, boutiques y una animada vida nocturna, que son indicativos de la energía diversa de la ciudad. Por otro lado, para experimentar la vida al aire libre, el Parque Sanayeh ofrece un espacio verde en el medio de la ciudad donde se puede descansar y disfrutar del entorno.
Finalmente, ningún viaje a Beirut estaría completo sin saborear la gastronomía libanesa. Los mercados locales y los restaurantes ofrecen una amplia variedad de platos tradicionales que reflejan la rica herencia culinaria de la región. Los sabores y las experiencias culinarias son una parte esencial del viaje, proporcionando una ventana al alma cultural de Beirut.